LIFE: Pasos para adecuarse a una teleducación de calidad

La pandemia además de hacernos más conscientes sobre el tema salud, le puso el acelerador tecnológico a la manera en que convivimos. Tanto con el comercio, el trabajo y la educación. Aquí es cuando toma un papel protagónico las Tecnologías de Información y Comunicación, más conocidas como TIC.

¿Qué es eso y para qué nos sirve?

Pues de acuerdo con un artículo publicado en la revista de investigación Espirales llamado ‘Las TIC y la educación ecuatoriana en tiempos de internet’, hay tres cosas que no debemos perder de vista sobre estas grandes aliadas en tiempos de COVID-19.

– Las TIC son medios (aplicaciones) y no fines; son herramientas que facilitan el aprendizaje y desarrollo de competencias.

– Las TIC son generadoras de información y no de conocimiento, claro que con una mediación adecuada, esa información puede convertirse en conocimiento.

– En el aula de clases, las TIC son potenciales instrumentos cognitivos que pueden ayudar al estudiante a ampliar las capacidades intelectuales.

Aclarada esta parte y lidiando con el hecho de que para 2019, solo el 45,5% de hogares en Ecuador contaban con acceso a Internet, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), las aulas ahora trasladadas a la casa de cada alumno son un reto.

Trabajar en una concentración efectiva

Que los alumnos atiendan sus clases y asuman están en un día ordinario de escuela o colegio es de los grandes desafíos que esta educación puertas adentro ha impuesto. ¿Cómo resolverlo? Laboratorios LIFE te da aquí algunas ideas que puedes aplicar en tu hogar:

Priorizar el orden e ir construyendo rutinas. Tal como en el trabajo, que no se pierda la costumbre de seguir un horario, cambiarse el pijama y apegarse a un horario escolar con las clases programadas.

El sitio web de Aula Planeta sugiere que si bien los padres son quienes señalan cómo los pequeños deben organizarse, son ellos quienes deben hacerlo solos y entender cuándo es la hora del juego, de atender clases y hacer deberes.

Actualizarse con las plataformas en línea. Un aliado importante en estos días, además de tener un dispositivo con la tecnología suficiente y que reciba la señal de Internet necesaria, es equiparse con aplicaciones que faciliten el trabajo del estudiante. Entre ellas podemos mencionar a Meeting Words, (para hacer trabajos colaborativos donde pueden ingresar hasta 32 personas) Pearltrees (herramienta para organizar enlaces y archivos de todo tipo), TEDed (indispensable para tomar lecciones en línea y ser parte de grandes charlas alrededor del mundo).

Mantener contacto con los compañeros. No perder la buena costumbre de relacionarse con quienes fueron los más cercanos en las aulas. Buscar espacios para trabajar en conjunto y compartir ideas sin distraerse demasiado.

Buscar el espacio adecuado

Para que todo lo anterior funcione es básico diseñar un lugar que nos haga pensar que sí estamos recibiendo clases. Un escritorio, una silla ergonómica donde sea sencillo pasar algunas horas y con la luz y materiales suficientes para poder estudiar sin interrupciones.

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